La medida se adopta como consecuencia de los nuevos hábitos de los conductores madrileños, según informa el Ayuntamiento, quienes aprovechando las reformas viarias de los últimos meses han cambado, en muchos casos, sus rutas habituales.

El actual panorama exige reordenar el despliegue de efectivos destinados a las distintas unidades de tráfico, que si ya venían adaptándose a las nuevas circunstancias, a partir de ahora se integrarán en un dispositivo que se propone coordinar de forma más eficaz la labor de las diferentes dotaciones policiales.

La nueva ordenación prevé puestos fijos -con un horario habitual de 7,30 horas a 22,30 horas-, y puestos de hora punta -que darán cobertura en hrario de afluencia masiva de vehículos-. Los dispositivos estarán dispuestos todos los días laborables de la semana, habiendo previsto igualmente en 33 de estos enclaves un servicio de relevo para solapar los cambios de turno de las dotaciones policiales y garantizar el servicio de tráfico en esas zonas.

Asimismo, está previsto la disposición de otros puestos que serán establecidos de forma regular para atender problemas circulatorios de intensidades inferiores, que podrán ser susceptibles de modificaión o ampliación en el caso de darse cita cualquier incidencia extraordinaria que recomendase este plan de acción.

El total de puestos de tráfico asciende a 221, de los que 62 tienen un carácter fijo y 159 de hora punta. La mayoría serán cubiertos por las distintas unidades de tráfico, contando con la colaboración del resto de unidades de este cuerpo policial para atender cualquier novedad que afecte a la circulación rodada.