La portavoz de Ecologistas en Acción-ADDA, Marisa Pallás, declaró a Servimedia que la media de los seguros de responsabilidad civil, que cubren los daños ocasionados por canes, ronda las 7.000 pesetas anuales, lo que considera "excesivo" porque en Madrid hay más de 400.000 perros censados y los ataques a personas no son muy frecuentes.

Pallás afirmó que unos seguros elevados fomentan el abandono de las mascotas, lo cual acarrea importantes problemas ambientales y sociales.

Tambiénrecomendó al consejero de Medio Ambiente, Carlos Mayor Oreja, con el que se reunió el pasado miércoles, que los ayuntamientos madrileños habiliten zonas de esparcimiento para los perros, como de hecho existen ya en algunos parques de la capital.

Además, se mostró reacia con la prohibición de las correas extensibles y aconsejó a los propietarios de perros que pesen menos de 25 kilos que las utilicen.

Pallás reconoció que la consejería se mostró "muy receptiva y abierta" para estudiar las alegacions de ADDA y les emplazó a una próxima reunión en septiembre.

PRIMERO LA LEY NACIONAL

Por su parte, la presidenta de la Asociación Nacional de Defensa de los Animales (ANDA), Mariana Sanz de Galdeano, aplaudió la decisión del Gobierno regional de posponer la aprobación de la orden sobre perros y gatos (prevista para el 26 de agosto) y deseó que primero se ponga en marcha la ley sobre tenencia de animales peligrosos, pendiente de aprobación en septiembre en el Parlamento.

"Es ridiculísimo que hagn una normativa regional a finales de agosto y otra en septiembre que se amolde a la ley nacional. Además, no deben hacer una ley sin haber consultado a las personas que realmente entienden", subrayó.

Sanz de Galdeano recalcó que la normativa anunciada por la Comunidad de Madrid a principios de agosto contiene "muchas bobadas que había que quitar", como la prohibición de las correas extensibles o la fijación de una prima obligatoria al seguro de responsabilidad civil.

"La cantidad la fijan la comañía de seguros y el señor que va a pagarla, con lo que es una cuestión particular y no hay por qué meterse", apostilló.

Sanz de Galdeano exigió que la nueva normativa sea muy estricta con los adiestradores que educan a los canes para las peleas. "Que haya un fuerte control a ciertos perros, no para que no ataquen a la gente, sino para que se acabe con las peleas", apuntó.