El consejero hizo esta irónica acusación ante la Comisión deJuventud de la Asamblea de Madrid, a la que acudió para informar de las consecuencias para los jóvenes de la aplicación de dicha ley.

Paíno dijo que el citado borrador, todavía pendiente de discusión y aprobación por la Cámara regional, no es avanzado ni progresista, "pues se sustenta en la Ley Corcuera" y porque "atufa a doble moral".

Criticó que se impongan "fuertes" multas a los locales donde se consuma "por ejemplo hachís, droga mucho menos dañina que el alcohol" y dijo que, con esas sancione, quieren "convertir a los camareros en perros policías que detecten dichas sustancias".

También censuró que el proyecto de ley no regule los horarios y que incluya el derecho de admisión y dijo que, desde el Gobierno de la CAM, se niegan a "cambiar la realidad de los jóvenes y quieren encauzarla con medidas policiales".

Paíno explicó el sentido que daba al término doble moral recordando que había estudiado en un colegio de curas, donde había un sacerdote, "el padre Rufino, que mientras hablaba d justicia y solidaridad, entraba en el aula con un palo en la mano y cuando todos acudían al comedor, él se iba a su habitación a comer y echaba las migas que le sobraban al patio, para que se las comiesen las palomas, que luego eran abatidas a perdigones. Eso es doble moral", subrayó.

Pedroche, en su turno de respuesta, negó las acusaciones de Paíno y dijo que "no buscamos que los camareros sean policías ni los porteros de las salas de fiestas agentes antidisturbios".

A su juicio, la Ley de Espetáculos quiere proteger la salud de los menores e hizo hincapie en que el texto prohibe la participación de menores en actividades violentos o pornográficas. También se prohibe la entrada y permanencia de los menores de 16 años en salas de fiesta, baile o discotecas.

Con respecto al régimen sancionador, señaló que se tipifica como falta muy grave la venta de alcohol a menores de 16 años y que las sanciones van desde la multa de 5 a 50 millones hasta llegar a la clausura.