El perfil del veraneante madrileño es el de una persona de mediana edad que viaja en coche, al litoral, con su familia, con una estancia media de dos semanas -principalmente en agosto- y que gasta algo más de 900 euros.

Por lo que se refiere a las fechas de las vacaciones, la mayora de los madrileños sigue optando por el mes de agosto, a pesar de que esta opción baja con respecto al pasado año. Los meses de junio y, sobre todo, septiembre se van consolidando como opciones elegidas por los madrileños para veranear, debido a que hay menos masificación y un mayor número de ofertas.

En cuanto al destino, más de la mitad de los veraneantes prefieren la playa, mientras que el resto se reparte entre el pueblo de origen, la montaña y unos pocos que optan por salir al extranjero. Este ao se aprecia un descenso de la preferencia por la playa y un fuerte aumento del pueblo de origen, por el menor coste que supone.

De cualquier forma, el litoral español sigue siendo el destino preferido por la mayoría de los madrileños, principalmente la costa de Levante.

DE "GORRONES"

Por lo que se refiere al tipo de alojamiento, los madrileños optan, en primer lugar, por acudir a casas de familiares y amigos durante el periodo estival, seguido de los hoteles, segunda residencia, apartamentos aquilados y, en un porcentaje menor, los "campings", opción elegida preferentemente por los jóvenes.

En cuanto al medio de transporte, uno de cada dos madrileños cogerá su propio coche para los desplazamientos en vacaciones, mientras que el resto se repartirá entre el autobús (20,3%), el tren (19,1%), el avión (7,6%), el barco (4,3%) o un coche de alquiler (1,5%).

Respecto a la duración de las vacaciones, se mantiene la tendencia a estar fuera de casa un periodo medio de alrededor de quince días, unque aumenta el porcentaje de personas que declaran estar al menos tres semanas. Sólo uno de cada diez pasa todo el mes de vacaciones fuera de su hogar y las familias que sólo salen una semana alegan motivos económicos.

En el capítulo presupuestario, la mayoría de los encuestados asegura que este año dedicará un mayor esfuerzo económico para disfrutar de la época estival. El gasto medio se sitúa en torno a los 900 euros por pareja, mientras que una familia de 4 miembros gasta cerca de 1.500 euros en us vacaciones.