"Toda solución de esta actividad es complicada y hay que tener en cuenta, en primer lugar, la seguridad de todos y, por otra parte, los derechos humanos que no se pueden violar de los individuos, en este caso de las mujeres que se dedican a esta profesión", declaró Morán a Servimedia.

No obstante, surayó que someter a este colectivo "manu militari" e introducirlas en una especie de gueto es rozar el "autoritarismo", si bien precisó que se debe garantizar la seguridad de toda esta zona en lo que se refiere al tráfico y a todo aquello que pueda atentar contra la sensibilidad del ciudadano.

"Las vías de acercamiento dependerán de la definición de esa zona y de poner en primer plano el derecho de estas personas, a las que no se puede someter a una coacción por una práctica que en este momento en Espaa tiene un vacío legal", afirmó.

El candidato socialista quiso dejar claro que el problema de la prostitución es muy complicado y no se le puede dar una solución global, sino que se debe estudiar cada situación de manera aislada.