Claver aseguró que estos árboles corren el riesgo de desplomarse con ua vestisca o por el peso de la nieve, con el consiguiente peligro para los coches que circulan por la calzada.

El tramo de la carretera en el que hay mayor riesgo de caída de árboles es el comprendido entre los kilómetros 15 y 19, siendo de especial dificultad el espacio situado entre los kilómetros 16 y 18.

En la tala, que ha sido iniciada a primera hora y proseguirá mientras haya luz, participan un total de 15 personas, entre las que hay 7 motoserristas, 3 agentes forestales y los conductores d 2 camiones cargadores.

Según Claver, en el día de hoy se cortarán entre 130 y 150 pinos, por lo que la labor de retirada de los árboles que representan un riesgo para la circulación de los vehículos podría concluir mañana.

El que la operación haya sido iniciada hoy con el consiguiente retraso para la apertura del puerto de Navacerrada, se debe, según Claver, a que en los días precedentes no se daban las condiciones de accesibilidad necesarias para que los camiones pudieran recoger los árboles taados.

Asimismo, Claver atribuyó una parte importante de la responsabilidad al anterior Gobierno socialista de la Comunidad de Madrid, "que adoptó la decisión política de no talar árboles en Navacerrada, aunque fuese necesario".