La manifestación había sido convocada por la Asociación Funeraria de España (Afues) para pedir el fin de la exclusividad en el término de Madrid de la Empresa Mixta de Servicios Funerarios (EMSF), controlada con el 51 por cien por el Ayuntamiento, pero gestionada por Funespaña, que agrupa a 400 empresas del sector de todo el país.

La caravana, que guardóuna perfecta 'fila india', partió de la escampada del estadio Vicente Calderón con un poco de retraso sobre la hora de salida, a las 12,20 horas, según indicó a Servimedia la Policía Municipal.

Dada la longitud de la hilera de furgones, aunque a las 15 horas ya estaban los vehículos de la cabeza frente a la Consejería de Salud, en la calle O'Donnell, los de la cola estaban todavía en Alcalá. Hacia las 14,30 horas, el tramo Alcalá-O'Donnell estaba colapsado por lo crítico de la hora y la 'marcha fúnebr'.

La Policía Municipal señaló asimismo que la anunciada manifestación había reducido esta mañana la intensidad de la circulación en Cibeles y otras calles céntricas. Los agentes vigilaron todos los cruces para permitir la circulación por las calles transversales.

Por su parte, el gerente de la EMSF, Juan Antonio Valdivia, defendió la legalidad del monopolio en aras de ofrecer a los usuarios un servicio a su medida, con tarifas claras y no, como ha venido sucediendo cuando las funerarias de Afuesoperaban en la ciudad, "dependiendo de la cara que le vean al cliente, así le cobran".

Asimismo, el sindicato Comisiones Obreras manifestó hoy su oposición a las reivindicaciones de Afues y su respaldo a la resolución de la Consejería de Salud, prohibiendo la actividad en Madrid de compañías funerarias ajenas a la EMSF, "como única garantía de prestación de unos servicios de calidad que redundan en beneficio de la ciudadanía".