A las doce del mediodía todavía seguía muy complicado el tramo Casa de Campo-Punte de Toledo, hasta el punto de que previsiblemente empalmará el atasco con el habitual del mediodía de los viernes, señalaron las mismas fuentes.

La causa principal ha sido la fuerte lluvia, que ha reducido considerablemente la visibilidad, así como algún que otro golpe por alcance sin mayores consecuencias (tres en la M-30 y otro más en las calles del centro, al menos). Incluso, estos pequeños accidentes beneficiaban la circulación, señaló el portavoz municipal, porque la calzada quedaba despejadapartir del punto de choque.

En cuanto al interior de la M-30, los puntos habitualmente conflictivos han estado peor que de costumbre y la hora punta se ha prolongado de 9,30 a 10,30 horas.

Por otro lado, la M-40 sufrió problemas circulatorios entre las 7,30 y 10,30 horas, manifestó a Servimedia la Dirección General de Tráfico (DGT).

En el momento de máxima saturación, la M-40 estuvo colapsada entre los kilómetros 13 y 31 (18 kilómetros) en sentido N-IV a N-II, mientras que en la otra calzad los atascos fueron debidos a un camión, que se atravesó y provocó colas entre los kilómetros 13 y 18. Las carreteras radiales de acceso a la capital experimentaron los problemas normales de un viernes, según la DGT.