La concejal de Medio mbiente de la coalición, Nicasia de la Cruz, definió el dictamen como "importante y justo", y explicó que la resolución reconoce que las líneas eléctricas suponen un "permanente atentado contra la salud de los ciudadanos".

Además, De la Cruz explicó que su formación lleva años constatando los riesgos que conlleva para los madrileños la exposición a los efectos de los campos electromagnéticos, y el incumpliendo "flagrante" de las distancias mínimas de alta tensión a las viviendas y centros de uso colecivo, como los colegios.

"Hoy, con toda propiedad, podemos hablar de grave negligencia y de tolerancia de las instituciones con Iberdrola, cuando se están rebasando hasta seis veces los límites recomendables de exposición", añadió.

La concejal explicó que de las cinco líneas que se van a retirar, las de más grave impacto son las del sur: Usera y Villa de Vallecas.

"En Vallecas es una lucha histórica, ya que hace más de una década la dirección del colegio público Juan Gris exigió el enterramieto de la línea que atravesaba su patio y, aún hoy, sus alumnos siguen expuestos a ella", finalizó.