Ese modelo, el más pequeño de una oferta de la compañía estadounidense que obra en poder de CCOO, cuesta 810.000 dólares (101 millones de pesetas). Otras gamas superiores, como el 600 N o el 900 cuestan 157 millones y 415 milones de pesetas, respectivamente.

El Departamento de Bomberos de la Comunidad de Madrid no dispone de aeronaves, por lo que la Dirección General de Protección Ciudadana gastó en 1995 un total de 205 millones en alquiler de helicópteros sólo para la campaña de extinción de incendios en verano.

Con la compra de un helicóptero para el Cuerpo de Bomberos, la Comunidad de Madrid no sólo ahorraría sino que además dispondría de medios aéreos durante todo el año para la extinción de incendios y otras labres de emergencia, y no de forma temporal como ocurre ahora, según aseguraron las mismas fuentes.

El pasado mes de diciembre, cuando la Comunidad de Madrid puso en marcha el plan de inclemencias invernales, decidió no renovar el contrato del único helicóptero del que disponían en el 95.

Según los datos facilitados a Servimedia por el sindicato, los helicópteros que se utilizaron la pasada temporada en la extinción de incendios forestales eran de propiedad de la empresa "Trabajos Aéreos y Fotográfcos", empresa que cobró por el alquiler, sueldo de personal, combustible, mantenimiento y seguro, 162 millones de pesetas por cada 500 horas de vuelo. En total, se utilizaron seis aeronaves de alquiler.

Con estos datos, el sindicato reitera la necesidad de un cambio en la política de utilización de los medios aéreos, manifestando la necesidad de modificar el antiguo criterio administrativo de contratación de medios a Empresas Privadas por una paulatina incorporación de recursos materiales y personalesque pertenezcan a la Comunidad de Madrid.

Asímismo, propone la utilización de personal ya integrado en el Departamento y que mediante un el curso de especialización de la Dirección General de Tráfico o de la Dirección General de Policía quedaría capacitado para prestar servicios como piloto de bomberos.

A juicio de CCOO, en tanto los materiales y el personal de los servicios aéreos no estén directamente integrados en la Comunidad de Madrid, resulta imprescindible exigir a las empresas privadas laoperatividad mixta, es decir, la inclusión en la tripulación de la aeronave de un segundo piloto perteneciente al Cuerpo de Bomberos.

Con la incorporación de un segundo piloto funcionario e integrado en el Departamento, el sindicato pretende que se fomente la formación de personal propio, reducir los costes derivados de la contratación privada y optimizar las tareas de enlace entre los servicios de tierra y los de aire.