Según el pintor, los cuadros reproducían escenas de violaciones y vejaciones domésticas, con el propósito de denunciar que la familia es en muchas ocasiones el lugar en que se prodcen este tipo de actos.

Ruiz Gallardón señaló que la decisión de retirar los cuadros persiguió únicamente evitar "el proselitismo con dinero público para dar a conocer determinadas manifestaciones contra los derechos de los niños y la mujer"

Añadió que "es tan razonable" su postura, que le sorprende que "pueda haber una polémica en relación con este asunto. Nadie es menos partidario que yo de prohibir absolutamente nada, pero hay una cosa que está clara, que nosotros no podemos, con dinero públic, financiar proselitismo de actuaciones que sean racistas, xenófobas, contrarias a los derechos de la persona".

En el caso concreto del pintor censurado, explicó que, segun el informe del Defensor del Menor y del Instituto de la Familia, "los contenidos de esta obra eran gravemente atentatorios contra los derechos de los niños y de la mujer".

"Nuestra obligación es no destinar dinero público ni prestar espacios públicos para hacer proselitismo de algo que está en contra de la infancia", subrayó Gllardón.