Antes de la votación, los distintos portavoces intervinieron para contestar al discurso de investidura de ayer. Angel Pérez, portavoz e IU, manifestó que espera que en esta legislatura la Asamblea de Madrid sea un "espacio de debate político y no una caja de resonancia de las aspiraciones personales" del presidente autonómico.

Tras advertir del riesgo de tensiones sociales debido a políticas que obedecen a intereses particulares y no al bienestar social, señaló que "no se puede seguir durante mucho tiempo expulsando gente de Madrid por la vía del precio del suelo o la vivienda. No se puede seguir ocultando la pobreza bajo las alfombas de las grandes infraestructuras, y tampoco se puede seguir deteriorando la igualdad de oportunidades mediante el desprecio a lo público".

Pérez se mostró favorable a la unidad de la izquierda y dispuesto a "impulsarla con más claridad que en los pasados cuatro años". El líder de IU dijo que está preocupado por la sanidad y la educación e hizo hincapié en el problema del desempleo.

Añadió que IU defiende políticas activas para crear puestos de trabajo, entre ellas la implantación de las 35 hora, la mediación pública en el mercado laboral y una distribución de políticas que discrimine de forma positiva no sólo a los sectores sociales más discriminados sino a los ámbitos territoriales más afectados por el desempleo.

Por su parte, Cristina Almeida, portavoz del PSOE-Progresistas, acusó a Gallardón de practicar "una política de vencer pero sin convencer", y recordó que el PP ha perdido en las pasadas elecciones casi 200.000 votos.

Calificó de "hipócrita" a Gallardón por llamar a la particiación electoral en la campaña, "pero con sordina" y, refiriéndose a la petición de consenso realizado ayer por el presidente regional, dijo que la formuló "con la dosis de cinismo que habitualmente lo acompañan para que tal consenso fuera de principio imposible".

Asimismo, tras señalar que ayer, "en un día tan importante" para el presidente regional, sólo acudió a la Cámara regional el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, afirmó: "Señor Gallardón, menos mala baba y más ver la viga enojo propio que la soñada paja en ajeno", refiriéndose a las críticas del líder del PP a la coalición PSOE-PDNI.

UN CERO A LA IZQUIERDA

A renglón seguido, criticó los últimos cuatro años de Gobierno del PP y afirmó que Ruiz-Gallardón "ha sido un cero a la izquierda en las grandes decisiones del Estado, un cero a la izquierda ante el Gobierno de Aznar".

Centrándose en políticas de empleo de la Comunidad, criticó que el 55% de los desempleados son mujeres y que la tasa de paro de los hombres es deun 11,5% y la de las mujeres se eleva al 19,6%.

"Creemos que ustedes han apostado por una economía especulativa y no por una productiva y que el empleo creado en este tiempo ha sido debido exclusivamente a la dinámica del mercado y nada a su actuación como presidente de la Comunidad", añadió.

Almeida propuso potenciar desde la Comunidad, y con la participación de los ayuntamientos, los nuevos yacimientos de empleo, dando prioridad a los jóvenes, a las mujeres y a los parados de larga duración mayres de 45 años.

Denunció los incumplimientos referidos a las obras de la M-50 y a la ampliación de las líneas de cercanías que van de Fuenlabrada a Humanes o desde Móstoles hasta Navalcarnero, así como el crecimiento de la enseñanza privada en perjuicio de la pública.

DERECHOS DE LOS DISCAPACITADOS

En materia de políticas sociales, Almeida pidió el impulso para el pleno derecho de los discapacitados físicos, psíquicos y sensoriales y el desarrollo de la solidaridad en políticas de inmigración. Pedro Calvo, portavoz del PP, explicó que las políticas anunciadas por Gallardón garantizarán una comunidad moderna, reequilibrada social y territorialmente, más justa y en la vanguardia de España.

Ruiz-Gallardón, en el turno de réplica, contestó a cada uno de los portavoces, pero centró sus críticas en Almeida. El presidente autonómico la acusó de venir al debate de investidura sin preparar su discurso y desconociendo los asuntos abordados.

Señaló que, "ante sus descalificaciones, sólo ofrezo mi respeto y silencio", a lo que Almeida contestó que Ruiz-Gallardón está nervioso.