Dicha modificación afecta a las líneas 54, 58, (258) y 130, así como a la línea E que sirve al Campus Sur de la Universidad Politécnica de Madrid.

El objeto de estos cambios es adaptar la red de la EMT a la nueva situación del transporte en el distrito, tras la ampliación realizada por la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes de la línea 1 del Metro y la apertura de tres nuevas estaciones una de las cuales, la de "Sierra de Guadalupe", es un intercambiador de transportes con presencia tanto de la red de Metro como de la red de Cercanías de Renfe.

Las modificaciones se concretan en la prolongación de la línea E al intercambiador de la Sierra de Guadalupe y en la modificación del itinerario de la línea 130, cuyo trazado se altera para potenciar su vinculación con dicho intercambiador.

Asimismo, se prolonga la línea 54 hasta el barrio de Vilano, cubriendo el servicio que en la actuaidad presta la línea (258), que se suprime.

En cuanto a la línea 58, se modifica su itinerario para atender los nuevos núcleos de viviendas situadas junto al camino de Vasares. Finalmente, también se modifica el trazado de la línea nocturna N-8, para adaptarlo al nuevo itinerario de la línea 58.