Esta iniciativa ha contado en esta ocasión con una inversión de 622.694,26 euros, lo que supone un incremento del 75% con respecto a la anterior.

La teniente de alcalde y concejala de Empleo y Servicios al Ciudadano del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, aseguró hoy en rueda de prensa que el objetivo de esta campaña, desarrollada ente el 25 de noviembre de 2003 y el 31 de marzo de 2004, no es sólo incrementar el número de plazas para los "sin techo", sino también "profundizar en la atención a las personas que llevan viviendo mucho tiempo en la calle". "Queremos que no haya ninguna persona sin hogar que se quede sin atención", añadió.

De los 906 ciudadanos atendidos en las pabellones de la Casa de Campo, más de la mitad (59%) eran extranjeros, el 47% tenía entre 30 y 44 años y el 26% eran mujeres.

Con respecto al descenso de ersonas atendidas este año en la Casa de Campo, Botella señaló que puede deberse a que en esta campaña ha habido más dispositivos específicos para inmigrantes.

Uno de estos dispositivos ha sido un prefabricado situado donde se encontraban las oficinas de ampliación del suburbano, que ha venido a sustituir a la estación de metro de Atocha, utilizada en otras ocasiones como refugio para las personas sin hogar durante las noches más frías del invierno.

El nuevo refugio, que ha funcionado entre el 2 e diciembre y el 22 de marzo, disponía de 150 plazas, climatización y agua caliente, y proporcionaba a los asistentes cena y desayuno, así como la atención de un trabajador social a quienes lo precisaran.

Según indicó Ana Botella, el Ayuntamiento puso al servicio de los usuarios un autobús gratuito para trasladarlos desde la Glorieta de Carlos V hasta el prefabricado, donde fueron atendidos una media de 120 ciudadanos por noche.

PENSIONES

Por otra parte, la teniente de Alcalde explicó que ademá de en la Casa de Campo y en el prefabricado que sustituye al metro de Atocha, los "sin techo" se han alojado también en pensiones, registrándose una ocupación de 30 personas simultáneamente. En total, se han contabilizado 3.003 estancias en este tipo de alojamiento, lo que supone un incremento del 50% con respecto al invierno anterior.

Ana Botella señaló que en las pensiones se alojan, normalmente, los residentes del Centro de Acogida "San Isidro" que se encuentran más preparados para llevar una vida"normalizada". De esta forma, continuó, se dejan plazas libres en el centro para las personas con mayor "excusión social".

Para dar una buena atención a quienes llevan mucho tiempo viviendo a la intemperie, la concejala de Atención al Ciudadano explicó que durante esta campaña se incrementó el trabajo de las Unidades de Emergencia Social y de los Equipos de Calle, un trabajo que, añadió, se extenderá considerablemente durante la próxima campaña, cuando estén en funcionamiento las nuevas unidades móvils y los equipos del SAMUR Social.

Por último, Botella indicó que el Programa de Atención a Personas sin Hogar cuenta con medidas destinadas a ciudadanos que están en un alto grado de exclusión social, como el Programa de prevención de tuberculosis, que consigue que ciertos usuarios comiencen a preocuparse por su salud y adquieran la tarjeta sanitaria a la que tienen derecho.