Si finalmente es aceptado el proyecto por las autoridades regionales, el Ayuntamiento otorgará una concesión por 75 años a la empresa Palumi, S.A., integrada por los propietarios de la plaza de toros, para que puedan explotar las diferentes instalaciones a cambio de costar todas las obras del complejo, que exigirán demoler totalmente la plaza de toros de Vista Alegre.

Palumi construirá un aparcamiento en el subsuelo, bajo la nueva plaza de toros, con capacidad para 2.133 vehículos; en la planta baja habrá 10.200 metros cuadrados para comercios y encima se situará la plaza de toros con capacidad para 10.000 espectadores. Esta podrá cubrirse mediante dos semibóvedas superpuestas y ser utilizada, por tanto, bajo condiciones meteorológicas adversas tanto para torear comopara celebrar conciertos y todo tipo de espectáculos.

Además, los concesionarios tienen que realizar un paso inferior que comunicará, a través del aparcamiento, las calles General Ricardos y avenida de la Oca, lo que posibilitará la peatonalización del entorno de la plaza.

El concejal de Urbanismo, José Ignacio Echeverría, indicó que una de las condiciones del convenio es que los comerciantes de la zona tengan prioridad a la hora de alquilar los locales comerciales.

Echeverría criticó que lo representantes socialistas se abstuvieran esta mañana en la votación alegando que se dejaban de lado los intereses de los pequeños comerciantes de Carabanchel. "El Partido Socialista sigue un planteamiento de que cada vez que vamos a hacer una cosa es intentar torpedearla, y además, según nos vamos acercando a elecciones parece que es una obsesión", afirmó.