El objetivo de esta medida es acercar la Administración a los madrileños y adecuar las actuaciones a sus demandas, a través de la Dirección General de Calidad de los Servicios.

Mayor Oreja explicó que, para conseguir estos objetivos, se elaborará un plan y un proyecto de Ley de Simplificación de los Procedimientos Administrativos de la Comunidad, que "facilitará la desconcentración de competencias, eliminará trámites burocrático, reducirá plazos, disminuirá la documentación que deben presentar los interesados, mejorará la información de los ciudadanos y aportará transparencia en la gestión".

Su departamento también pondrá en marcha una serie de medidas, negociadas con los sindicatos, para adecuar la jornada de trabajo de forma gradual hasta conseguir en el año 2003 las 35 horas semanales.

Asimismo, señaló que se elaborará un proyecto de construcción y reestructuración de las infraestructuras judiciales, ante la próxima ransferencia de competencias en esta materia, para evitar la dispersión existente en la actualidad.