Este centro deemergencia, puesto en marcha en noviembre de 1998, se convirtió en el primer dispositivo español estable de atención a drogodependientes que llevó asistencia sociosanitaria hasta el mismo lugar donde los toxicómanos compraban su dosis y se las administraban.

El centro ha realizado, durante estos tres años, unas 30.000 intervenciones sanitarias y casi 10.000 sociales y ha conseguido que 263 personas se incorporen a programas de metadona.

El progresivo desmantelamiento de La Rosilla, junto a la huia de los pequeños narcotraficantes -principalmente hasta el cercano poblado de Las Barranquillas-, ha hecho que el centro de emergencia fuera bajando su nivel de actividad, lo que ha motivado su cierre.

Entre las actividades sociales básicas, el centro ha ofrecido 112.000 desayunos, 155.000 comidas, 120.000 cenas, 30.000 duchas, 800 mantas y 19.000 prendas de vestir, además de lavar la ropa de los usuarios en 7.600 ocasiones.

Asimismo, el servicio jurídico ha atendido 323 solicitudes de consultaasesoramiento y, desde que en julio de 1999 se abriera las 24 horas del día, se han producido alrededor de 60.000 pernoctas.

Todos los pacientes que aún seguían en el centro de La Rosilla han sido trasladados a los denominados "programas de derivación", entre ellos al centro de Las Barranquillas -inaugurado el pasado 1 de diciembre-, otro centro situado en Móstoles y dos centros más dentro de Madrid capital propiedad del ayuntamiento.