El invidente, junto a su perro guía, se dispuso a tomar un autobús de la línea 29 en la calle Arturo Soria, pero el conductor le indicó que no odía subir con el animal.

El ciego trató de explicarle que se trataba de un perro guía cuyo acceso está autorizado, exhibiéndole la documentación acreditativa, pero el responsable del autobús no cambió de opinión.

Dado que el usuario ciego se acomodó en uno de los asientos del autobús, reclamando su derecho a viajar, el conductor inmovilizó el vehículo y requirió telefónicamente la presencia del inspector de la empresa.

En vista de que el inspector tardaba en llegar, los restantes viajeros dl autobús lo abandonaron para tomar otro. Más de 20 minutos después llegó el inspector y comprobó la documentación acreditativa del perro guía, pero invitó a la persona ciega a descender del vehículo y a esperar otro autobús porque ese quedaba fuera de servicio al haber finalizado su jornada el conductor. El usuario no pudo efectuar su viaje en el autobús.

DENUNCIAS

El afectado ha presentado las correspondientes denuncias y la Asociación de Usuarios y Amigos del Perro Guía ha anunciado que se personrá en su defensa, ya que considera que el conductor ha vulnerado la Ley 23/99 de la Comunidad de Madrid, que favorece el "acceso de las personas ciegas y deficientes visuales, usuarias de perro guía, a su entorno" y considera estas conductas como infracción muy grave por tratarse de un servicio público.

Por su parte, la EMT ha iniciado diligencias para esclarecer si el conductor ha actuado negligentemente o si ha existido alguna circunstancia que haya motivado la actitud del conductor, según manifestóa Servimedia su director-gerente, Tomás Burgaleta.

El responsable de la EMT matizó que entre las circunstancias que hubieran podido influir figuran que el perro guía no estuviera debidamente identificado con una chapa en su collar o arnés, o que el usuario no presentara la oportuna documentación.

Burgaleta señaló que, en caso de concluir que el conductor ha actuado irresponsablemente, se hará acreedor de una sanción grave, ya que la EMT ha dado instrucciones a su personal de que se facilite el aceso de personas ciegas con perro guía a los autobuses.