Al mismo se podrán adherir de manera volunaria puntos donde se impartan cursos de idiomas, música, formación profesional no oficial , etc. Todos los adheridos podrán exhibir un símbolo de calidad empresarial, que acreditará el cumplimiento de las normas del Código.

Además de comprometerse a realizar una publicidad veraz, objetiva y suficiente de sus actividades de enseñanza, los centros adheridos utilizarán un contrato que contenga todas las condiciones económicas y descriptivas del curso que se contrata.

En el caso de pago anticipado, sscribirán un seguro que garantice la devolución del importe en caso de incumplimiento del contrato , y, en el supuesto de que el pago se efectúe a través de un crédito con una entidad financiera, se pactará expresamente que el crédito quedará vinculado a la enseñanza. En consecuencia quedará resuelto en caso de anulación o incumplimiento de la misma.

Los centros y academias que se adhieran al Código de Buenas Prácticas se comprometen también a aceptar el Arbitraje de la Dirección General de Consumo, pra resolver cualquier reclamación o controversia con los alumnos.

La aprobación del Código se ha formalizado mediante la firma de un protocolo con dos asociaciones representativas del sector: la Asociación Madrileña de Centros de Formación de la Unión Europea (AMACFE), integrada en CEIM (Confederación Empresarial Independiente de Madrid), y la Asociación Nacional de Centros de Educación a Distancia (ANCED). La puesta en marcha del Código de Buenas Prácticas se apoyará con una campaña publicitaria en rdio y televisión.