Murtra nunció que mañana, 15 de junio, se pone en marcha el dispositivo especial contra incendios y se inicia la "fase de alto riesgo", que se mantendrá hasta el 15 de septiembre.

Los incendios producidos en los cinco primeros meses del año han quemado 129 hectáreas de superficie forestal desarbolada (89 en 1994) y 28,8 de zona arbolada (4,1 en el 94), lo que da un total de 156,5 hectáreas, frente a las 93 del año pasado por estas mismas fechas.

Los datos referidos al mes de mayo señalan que se han prodcido 38 incendios, 26 de ellos con una superficie quemada inferior a una hectárea, 9 entre 1 y 5 hectáreas y 3 siniestros en los que la zona afectada es superior a 5 hectáreas.

Murtra destacó que, a pesar del incremento del número de incendios con relación a 1994, la superficie afectada "no es significativa" y achacó este aumento de siniestros a la sequía.

Tras mostrarse optimista porque las lluvias caídas la semana pasada en la región "han amortiguado un poco" los riesgos de incendios, subrayó qe la entrada en la fase de "alto riesgo" supone que "no se puede encender ningún tipo de fuego en el campo".

La Dirección General de Protección Ciudadana cuenta para combatir los incendios con los 750 bomberos profesionales (diariamente 150 están de servicio) y desde el día 15 con la colaboración de 238 bomberos auxiliares, 111 personas que ayudarán en la vigilancia y prevención y la Guardia Civil.