Blázquez ha adoptado est decisión tras recibir informes negativos sobre la solicitud de Carrefour elaborados por la Dirección General de Comercio de su consejería y por el Ayuntamiento de Madrid, así como indicaciones del Tribunal de Defensa de la Competencia respecto a la conveniencia de evitar la concentración de mercado y aumentar a un tiempo la presencia en los nuevos barrios de Madrid de más marcas comerciales.

Tras precisar que en su momento se estudiará el tipo de comercio que sea necesario en el PAU de Vallecas, Blázuez afirmó que "esta es una buena oportunidad para que el pequeño y mediano comercio y sobre todo sus asociaciones representativas se organicen, hagan un esfuerzo inversor y participen en la creación de centros comerciales que, de todas maneras, son inevitables".

"Lo que no se puede repetir" añadió, "es lo que ocurre actualmente en el barrio de Los Espartales, donde un núcleo muy grande de vecinos tiene que desplazarse más de 10 kilómetros para comprar suministros".

El consejero recalcó que "la Aministración puede ayudar con financiación para que el pequeño comercio tome la iniciativa ante estas oportunidades que Madrid está poniendo a su disposición, pero esas asociaciones, que son muy eficientes para protestar, también deben serlo para construir y ser competitivas, porque si los pequeños y medianos no invierten en los nuevos barrios de la capital, lo harán los grandes".