Según consta en el convenio, UGT y CCOO destinarán principalmente esta residencia a "formación sindical y profesional e intercambios internacionales" y aprovecharán su emplazamiento para "optimizar su uso durante los fines de semana y épocas de vacaciones con actividades de ocio, tiempo libre y turismo de montaña".

Espinar afimó que la cesión de esta residencia a los sindicatos supone una apuesta del Gobierno regional por la economía social y la vertebración social.

La finca de Robregordo dispone de 18.000 metros cuadrados en cuatro plantas y, según los sindicatos, podrá usarse a finales de año y a partir de esa fecha se podrán iniciar actividades diseñadas conjuntamente por UGT y CCOO, que compartirán la gestión y dirección del centro.