Sgún informó el consistorio madrileño, los trabajos consistirán en remodelar y adaptar la planta de reciclado y compostaje de TGM a los nuevos procesos de recogida selectiva en origen que se van a implantar en la capital, separar pluviales e integrar paisajísticamente los edificios.

Además, se cubrirán las áreas de fermentación de la planta y se instalará un sistema de aspiración y filtrado de aire para evitar los olores procedentes de la descomposición de la basura. Estas obras cuentan con un presupueto de cerca de 1.200 millones de pesetas y se han adjudicado a la unión temporal de empresas (UTE) Inima-Dragados-Urbaser.

En la planta de Tirmadrid, en la que se invertirán 2.100 millones de pesetas, se automatizará el volteo de la materia orgánica en una de las áreas de fermentación y se modernizarán las cintas transportadoras de la basura a compostar.

También se actuará en la balsa de lixiviados y en las eras de fermentación y se instalará, como en la planta de TGM, un sistema de aspiración y iltrado de aire que evitará la producción de malos olores. Estas obras se han adjudicado a la UTE formada por Dragados y Urbaser.