Según informó hoy laJefatura Superior de Policía, los presuntos asaltantes lograron introducirse en la casa de su víctima después de que la mujer detenida se hiciese pasar por la vecina de abajo y dijese que "a causa de la obra que está haciendo en su cuarto de baño, se está inundando el mío".

Tras entrar en la casa, los asaltantes amenazaron a la víctima con una navaja y le exigieron el dinero, pero al no estar satisfechos con las joyas y las 25.000 pesetas que les entregó, la obligaron bajo amenazas de muerte a firmar n talón por 100.000 pesetas.

Mientras los dos hombres maniataron a la víctima y se quedaron en el piso, la mujer se dirigió a una entidad bancaria para hacer efectivo el cheque. Media hora después, comunicó a sus compinches a través del portero automático que ya tenía el dinero, por lo que éstos desataron a la dueña del piso y la abandonaron.

Los funcionarios que se hicieron cargo de las investigaciones entrevistaron a los dos operarios encargados de la obra del piso. Uno de ellos, de nacionalida peruana, dijo que había comentado de buena fe a un compatriota el lugar donde estaba trabajando, lo que permitió identificar a Gustavo Alfredo M.V., quien confesó su participación en los hechos.

Horas después fueron arrestados la mujer, que era su suegra, y el otro presunto coautor del atraco, recuperando parte de las joyas. Tan sólo la mujer tenía antecedentes policiales por tráfico de drogas y hurto.