Concretamente, el nuevo centro potenciará el estudio de materiales compuestos, lo que permitirá la fabricación de aviones más ligeros, con menos consumo de combustible y niveles de emisiones contaminantes más reducidos que los actuales.

El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, afirmó en el acto que "Europa tiene una posición de liderazgo en este sector, que es impottante proteger". En este sentido, aplaudió la colaboración entre administraciones y empresas.

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, explicó que esta fundación sin ánimo de lucro pretende ser un centro de excelencia en la aplicación de los materiales compuestos, especialmente la fibra de carbono, que es un "ámbito estratégico para la industria española". Además, las aplicaciones podrán utilizarse en otras industrias, como la robótica y la de automoción.

La financiación de este centro, en el que trabajarán unos 80 ingenieros superiores, procederá en un 50% de la empresa aeroespacial europea EADS, mientras que el 50% restante lo aportarán el Ministerio de Industria y la Comunidad de Madrid.