La niña, de unas horas de vida y con restos de placenta aún adherida al cuerpo, fue hallada en la calle San Bernardino por un viandante, que escuchó el llanto de la recien nacida y sacó del contenedor la caja de zapatos en la que etaba colocada.

La patrulla que se personó en el lugar de los hechos trasladó urgentemente a la niña al Hospital Clínico. Según la dirección médica del hospital, se encuentra en buen estado, aunque debió ser colocada nada más llegar en una incubadora al sufrir pérdida de temperatura.

Los empleados del hospital han llamado de forma provisional a la niña "Bienvenida", que ha sido acogida calurosamente entre las enfermeras y médicos del centro.

"Bienvenida" permanecerá en el hospital hasta que peda ser puesta a disposición del departamento de adopción de la Comunidad Autónoma de Madrid, que se encargará de buscarle unos padres.