El dispositivo para el encuentro, declarado de alto riesgo por la Comisión Nacional Antiviolencia, está compuesto por 400 agentes del Cuerpo Nacional de Polcía, con unidades de intervención a pie, a caballo, guías caninos, sección de motos, radio patrullas y un helicóptero.

Colaboran además 150 agentes de la Policía Municipal, otros 150 pertenecientes a la seguridad privada del propio stadio y 100 miembros de los distintos servicios asistenciales (Cruz Roja, Samur y protección civil), con un total de 8 ambulancias y una UVI móvil.

Según ha informado la policía turca a la española, está previsto que se trasladen alrededor de 1.000 aficionados, ya que éste es el número de entradas solicitadas por el club turco, aunque la cifra podría verse aumentada por aficionados que vengan por su cuenta.

El traslado de los seguidores turcos del aeropuerto de Barajas al estadio será controladoen todo momento por la policía, quien también prestará atención a los jugadores, directivos y equipo arbitral durante su estancia en la capital.

Además se establecerá un sistema continuo de vigilancia en todas las puertas de acceso al recinto deportivo para evitar la introducción de bebidas alcohólicas y objetos expresamente prohibidos por la Ley del Deporte.