Las bolsas de desconocimiento de la relación entre la peseta y el euro se concentran en las personas de mayor edad y con menor nivel educativo.

Más del 85 por ciento de las personas entrevistadas reconocen verse obligadas a realizar conversiones de euros a pesetas con cierta frecuencia para enterarse de los precios que deben pagar por los productos y servicios queadquieren.

En cuanto a las consecuencias negativas que la introducción del euro ha tenido en la vida de las familias, los entrevistados destacan un aumento de los precios y la sensación de inseguridad ante cualquier tipo de transacción económica.

Por lo que se refiere a los efectos positivos atribuidos a la nueva moneda, los encuestados destacan la facilidad para viajar sin necesidad de cambiar dinero ni efectuar complejas operaciones mentales de conversión para comparar precios de los mismos prouctos entre distintos países.

Dado que muchos consumidores madrileños siguen pensando en pesetas, concluye el Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio, sería aconsejable que los establecimientos comerciales mantuvieran al menos durante todo este año la doble indicación de los precios, de manera que los compradores puedan tener una idea más precisa de cuánto cuesta el producto que van a adquirir.