Señaló que este plan cuenta con un presupuesto de 80 millones de euros, que será financiado conjuntamente por la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital. El plan prevé dotar de ascensores a las 45 nuevas estaciones que se construirán, incorporando un total de 14 elevadores.

Añadió que también se instalarán ascensores en otras 49 estaciones de la antigua red metropolitana, 16 de ellos en la remodelación de la línea 3.

Granados destacó que, en 2007, Metro dispondrá de 510 ascensores repartidos en 189 estaciones y añadió que "también se van a superar, en muchos casos, los problemas de limitación de altura existentes en la estaciones de construcción antigua y que impiden la instalación de ascensores tradicionales que no cumplirían los requisitos mínimos de imensión y seguridad, exigidos en las normativas correspondientes".

Para ello, Metro adoptará soluciones concretas en cada caso y desarrollará nuevos diseños, como el primer ascensor inclinado de toda la red, recientemente presentado en la estación de Atocha-Renfe.

Con ese modelo "se podrá salvar el desnivel entre andenes y los problemas de espacio existentes", señaló el consejero, que explicó que el objetivo principal de este plan de accesibilidad es "posibilitar que utilicen el suburbano el mayr numero de posibles ciudadanos, con especial atención a aquellos colectivos que tienen grandes dificultades para su uso, como los discapacitados o las personas mayores".

Granados informó de que el citado plan de accesibilidad incluye la dotación de ascensores en estaciones históricas como Legazpi, Cuatro Caminos, Plaza Castilla, Méndez Alvaro, Bilbao o San Bernardo.

Asimismo, recordó que, en 1995, antes de la llegada del PP al Gobierno regional, sólo había 6 ascensores en las estaciones de Alto el Arenal y Miguel Hernández, "cifra que se ha incrementado hasta alcanzar un total de 247 unidades repartidas entre 95 estaciones".