Esta investigación sobre "La juventud en la Comunidad de Madrid de cara al siglo XXI" revela que la región acogió el año pasado a 154.767 jóvenes extranjeros (12% sobre el total de la juventud de la región), frente a los 43.600 (3,5%) registrados a comienzos de 2000.

El estudio también destaca que el 80% de los menores de 30 años en la Comunidad de Mdrid lee entre 0 y 10 libros al año, aunque dedican "mayor énfasis" a los estudios que los del resto de autonomías españolas.

Por otro lado, un 91% de los jóvenes aspira a tener hijos, un 76% ha sido testigo de peleas en locales nocturnos, a un 64% no le preocupa su futuro, un 43% de los que trabajan disfrutan de un contrato indefinido y un 19% dispone de un crédito bancario.

INMIGRACION

El estudio de la Consejería de Educación muestra que la llegada de los inmigrantes extranjeros a la Comunida de Madrid a partir de 2000 invirtió la dinámica negativa del descenso de jóvenes en la región registrado en la última década del siglo XX.

La cifra de 154.767 jóvenes de nacionalidad no española residentes en la región, registrados el 1 de enero de 2002, pone de manifiesto que se ha triplicado el sector juvenil inmigrante en menos de un trienio, al existir 43.600 extranjeros menores de 30 años a comienzos de 2000.

Casi las dos terceras partes de los jóvenes no españoles de la región vive en la "lmendra central" del municipio de Madrid, la periferia sur de la capital y la Sierra Norte.

La Consejería de Educación considera que "sólo si se mantuviera el fortísimo ritmo de inmigración de los dos últimos años, la Comunidad de Madrid podría mantener su volumen de población joven sin disminuir".

La mayoría de los jóvenes residentes en la región, tanto extranjeros como españoles, optó en los últimos años por trasladarse fuera del municipio de Madrid. Según el estudio, la capital ha perdido un 1,05% de jóvenes desde 1986, mientras que la población juvenil creció en la corona metropolitana un 65,96%, a la vez que resulta más rápido el aumento en el conjunto de municipios no metropolitanos, con un 74,53% de crecimiento relativo.

EMANCIPACION

El informe de la Consejería de Educación resalta también que los jóvenes madrileños permanecen cada vez hasta más tarde en el hogar paterno/materno. En 1986, el 72,61% de los jóvenes varones de 29 años ya estaba emancipado, al igual que el 80,85 de las mjeres de esa misma edad. Diez años más tarde, estas proporciones han bajado al 52,84% y 66,39%, respectivamente.

La gran mayoría de los jóvenes de la región, un 82%, nunca ha vivido en otro lugar que no fuese la casa de sus padres. La disposición hacia la vivienda en propiedad es considerablemente más fuerte en los grupos sociales inferiores que en los más elevados y tiene que ver, según el estudio, con la mayor seguridad que da frente al alquiler.

MATRIMONIO E HIJOS

La edad media a la que contaen matrimonio es de 30,4 años para los hombres y 29 para las mujeres, con un incremento constante paralelo al descenso en las tasas de nupcialidad joven. La forma "más estimada" de establecer un nuevo hogar es el matrimonio tradicional a través de la Iglesia, opción por la que optan un 57% de los jóvenes.

El estudio revela, sin embargo, que un 37 por ciento de las parejas que optan por casarse a través de la Iglesia Católica cree "preferible" que la boda "vaya precedida por un tiempo de vida en común.

Los jóvenes madrileños que se casan tardan 3,5 años en tener el primer hijo, frente al período de "menos de un año" que se registraba en 1975. El número de nacimientos anuales por 1.000 mujeres de 15 a 49 años ha pasado de 83,32% en 1975 a 41,20% en 2000. No obstante, el 91 por ciento de los jóvenes madrileños declara su intención de tener hijos e, incluso, un 85% desearía tener dos o más niños.

Los nacimientos son cada vez más escasos, pero la mortalidad de los jóvenes ha ido disminuyendo en ls últimos años, aunque, según destaca el informe, las muertes de jóvenes varones triplican a las de mujeres, con una prevalencia de causas externas, como los accidentes de tráfico.

ESTUDIO Y TRABAJO

El estudio revela también un considerable incremento en los últimos años en el acceso a la formación en sus distintos niveles de las mujeres jóvenes de la región. La proporción de titulados universitarios jóvenes (entre 25 y 29 años) casi se ha duplicado en diez años, al pasar de un 18% en 1986 a alrededr de un 33% en 1996.

El 65% de los jóvenes madrileños reconoce hablar un idioma distinto al castellano y un 71% tiene conocimientos "altos o medios" de informática.

Las conclusiones de esta investigación demuestran que los jóvenes de la Comunidad de Madrid se dedican de manera exclusiva a los estudios con mayor énfasis que el promedio nacional. También se observa que en Madrid está algo más extendida la práctica de compatibilizar estudios y trabajo, mientras que la dedicación exclusiva a la vida aboral es menor que en el promedio nacional.

Un 35 por ciento de los jóvenes de la región menores de 30 años está "en busca de trabajo" en la actualidad. Los jóvenes madrileños cada vez están más cualificados, como ponen en evidencia los datos de permanencia en el sistema educativo y las titulaciones alcanzadas, aunque no más de la tercera parte de los universitarios desempeñan puestos conformes a sus estudios.