En estos accidentes se vieron implicados 28 coches, y tres de los conductores de estos vehículos dieron positivo en las pruebas de alcoholemia.

El percance más grave tuvo lugar en la Avenida de Portugal, donde un coche, cuyo conductor superaba el grado de alcohol permitido, chocó contra la mediana, dañó cuatro vallas de separación, saltó por encima de una de ellas y rompió los cristales del primer pisode un edificio de oficinas.

En el vehículo viajaban otras dos personas. Las tres fueron atendidas por el Samur, y una de ellas tuvo que ser trasladada al Hospital Clínico de Madrid.