Madariaga, quien señaló que no considera "oportuno políticamente" el atentdo contra Gregorio Ordónez, manifestó que al portavoz del PP en el País Vasco se le debería haber combatido políticamente y no con las armas, puesto que se trataba de un político.

"Gregorio Ordóñez, por muy adversario político que fuera, era un político y por consiguiente había que combatirle por medios políticos, y no por medios militares o llámase como se quiera", explicó.

Madariaga agregó que, en su opinión, el motivo que ha podido llevar a ETA (suponiendo que sea la autora) a atentar contra u militante del Partido Popular es que esta formación política ha dicho siempre "con harta claridad" que con ETA no hay que negociar ni hablar sobre el contencioso vasco-español.

A su juicio, HB no aplaude este atentado y argumenta que sentándose en una mesa de negociación, "automáticamente cesarán atentados como el de Ordóñez", algo con lo que se declaró de acuerdo: "En eso no les falta razón".

El veterano militante abertzale opina que ahora existe "la oportunidad político-histórica" de dar la paabra a los políticos e intentar resolver los problemas políticamente, razón por la cual reprueba "totalmente" cualquier acción armada que se lleve a cabo hoy en día.

OPORTUNIDAD POLITICA

"Llega un momento en el que para dirimir el caso de la liberación nacional de un pueblo, de una sociedad convulsa desde hace tiempo, no es ya oportuno políticamente intentar arreglarlo por las armas", reiteró. "Por eso digo que hoy día, en 1995, es cuestión de oportunidad política intentar arreglar el contencioso po medios políticos, no armados".

En su opinión, ya es hora, "con un poco de inteligencia política por parte de unos y de otros", de terminar con un conflicto que dura ya 200 años y de responder a las aspiraciones más profundas de la mayoría del pueblo vasco, porque si no se da una respuesta satisfactoria a esas reivindicaciones, como la independencia nacional y cultural, no se resolverá nada "y nuestros hijos y nuestros nietos volverán a las andadas, volverán a tomar las armas y volverá a correr la sanre".

"Si el problema de fondo sociopolítico y cultural no se arreglara, el conflicto volverá a ponerse encima de la mesa dentro de cinco, doce, quince o veinte años, y quizás con mayor virulencia y con mayor crueldad, y con muertes por ambas partes", aseguró.

Madariaga expresó su deseo de que ETA declare una tregua unilateral y que este gesto sea aceptado por el "enemigo" ("el imperialismo francés y español"), dando paso a un inicio de conversaciones que terminen en "una paz digna para todas las artes de este pueblo, que ya lleva peleando dos siglos".

Añadió que el caso irlandés es un "ejemplo abrumador y formidable" de resolver los problemas de forma civilizada, aunque los esfuerzos tienen que surgir de ambas partes, "no sólo de ETA".

Iulen Madariaga reiteró que, "lamentándolo mucho", abandonará HB si se confirma que ETA es la autora del atentado contra Gregorio Ordóñez y la formación política en la que milita no lo condena. "Cada uno tiene que situarse donde su conciencia le diga que tnga que estar", dijo.

DIVISION EN HB

A su juicio, es evidente que este atentado provocará una convulsión interna en HB si ha sido realizado por ETA y si el partido no se desmarca de la reivindicación que en su día pueda hacer la organización armada, "porque mucha gente dentro de HB, como yo, piensa que es el momento de resolver las cosas mediante el diálogo político".

Madariaga elogió la "dignidad" demostrada por la concejala de HB de San Sebastián Begoña Garmendia, primera voz que se levantó pblicamente contra el asesinato de Ordóñez en el seno de HB, con la que solidarizó, así como la carta del preso de ETA José Miguel Latasa. "Ha sido una actitud que me ha conmovido mucho", dijo.

Por otro lado, dijo que, como denunció HB en un comunicado público, existe una "cruzada antivasca" y que algunos han aprovechado el atentado contra Ordóñez para "arremeter contra todo lo que es vasco, metiéndonos a todos en el mismo saco". A su juicio, hay "algunas sensibilidades políticas" que no comprenden lasreivindicaciones de los vascos sobre su nacionalidad y "se nos mira como si fuéramos marcianos"

Iulen Madariaga expresó finalmente su deseo de que entre todos, políticos y medios de comunicación, "ayudemos a no echar leña al fuego" para intentar, lo antes posible, arreglar las cosas "lo más humana y civilizadamente posible".