Lucas lamenta a través de un comunicado que la actividad cultural municipal en los distritos se reduzca a cero en agosto, y se queja también de que los madrileños que se quedan en Madrid no puedan disfrutar de una oferta accesible para todos.

De hecho, según Lucas, los 97 centros destinados a tal fin tienen un horario reducido este mes, porque cuentan con sala de lectura, pero no albergan programación alguna. Lo mismo ocurre con los 25 auditorios que hay en 16 de los 21 distritos o con la gran cantidad de plazas o parques que hay por la ciudad.

"Esta triste realidad", señala Lucas, "muestra de nuevo la pésima distribución que el Gobierno municipal hace con la cultura, discriminando en razón de su domicilio". Critica que en esta época del año sólo queden los Veranos de la Villa, "siempre en el centro de Madrid, siempre con eventos caros y ahora también con una oferta sensiblemente más baja que en julio".

Según Lucas, quien quiera cultura al aire libre sólo puede optar por los Jardines de Sabatini o el escenario de la Casa de Campo, "ambos de pago", algo, a su juicio, "preocupante", como también lo es que las actividades de los Veranos de la Villa se concentren sobre todo en julio y se deje para agosto escasamente el 30%. "Madrid sigue vivo en agosto pese a que el Gobierno municipal no lo crea asi", ironiza.

Además, Lucas critica la falta de sensibilidad social del Ejecutivo de Gallardón, "que programa cultura por la que hay que pagar hasta 65 euros", con lo que "tienen el dudoso honor de convertir los Veranos de la Villa en el festival municipal más caro de España", que, además, se concentra en sólo siete distritos de la almendra central.

Lucas asegura que en cualquier gran ciudad de Europa se entiende que agosto es el mes en el que llegan más visitantes de fuera, por lo que establecen una oferta cultural muy amplia y equilibrada en verano. "Mientras estas ciudades aprovechan al máximo sus recursos culturales en verano, Madrid pierde potencial cada agosto respecto a las grandes urbes europeas", concluye.