López de Lerma hace estas consideraciones en su cara de despedida de las tareas políticas, que abandonará al finalizar esta legislatura, tras 24 años de actividad ininterrumpida en el Congreso de los Diputados, para "regresar" a sus "ocupaciones profesionales".

En su despedida, se abstiene de valorar los logros de su actividad política, pero declara su "creencia en la participación activa, sensata, rigurosa y comprometida del catalanismo político en la modernización de España".

López de Lerma expresa su deseo de ser recordado por su "coherencia""honradez intelectual" y se manifiesta orgulloso de haber representado a la circunscripción de Girona durante casi un cuarto de siglo.

Señala que el desempeño de sus responsabilidades como vicepresidente de la Mesa del Congreso durante tres legislaturas y como portavoz del Grupo de CiU han significado "exigencia en el trabajo, convivencia en la pluralidad, actitud de respeto, comprensión y, obviamente, sentido integrador bajo el manto de la democracia".

"Tantos años viviendo el Congreso de los Dputados", continúa la carta, "me confirman que España necesita de la riqueza de sus nacionalidades y regiones, así como de un marco favorable al diálogo y al entendimiento alejado de la confrontación estéril".

A modo de felicitación navideña, el vicepresidente cuarto del Congreso pide que esta misiva se tome como despedida y como "invitación al reencuentro".