"Nunca había abido una situación tan preocupante e inquietante de interferencia continua en la independencia judicial a través del Ministerio Fiscal, con la intención de favorecer al partido en el Gobierno", declaró el dirigente socialista.

Según López Aguilar, con este objetivo el Gobierno, a través del fiscal general, "paraliza cualquier investigación o causa judicial, sobre todo penal, en la que sufra cualquier tipo de riesgo un militante, dirigente o gobernante del PP que esté imputado, y, al mismo, tiempo perigue penalmente a los adversarios del Gobierno".

"Esto no había pasado en 25 años de democracia y no pasa en otros países", denunció López Aguilar, quien añadió que actualmente en la Justicia hay "dos carriles: uno para el PP y otro para los ciudadanos comunes, agravado este segundo si los ciudadanos son adversarios del PP".

El dirigente socialista manifestó que el PP quiere difundir entre la opinión pública la impresión de que en España se ha terminado la corrupción, cuando la verdad, a su juici, es que "la corrupción campa en este país".

Acusó al PP de haber "desmantelado" la Fiscalía Anticorrupción para que no se puedan perseguir los delitos políticos relacionados con este partido, como se demuestra, según dijo, en los casos de Gescartera o la actual "trama" de la Comunidad de Madrid.

Por último, López Aguilar también enmarcó en esta utilización partidista del Ministerio Fiscal los recientes nombramientos en esta institución. "El PP ha usado la legislación para lograr la depuración idológica" de algunos fiscales que no le eran afines, "laminando a fiscales de ejecutoria ejemplar por simple desconfianza política".