López Aguilar respondió así, en los pasillos del Congreso de los Diputados, a la exigencia del PP de que el Gobierno no asuma los compromisos requeridos por la banda terrorista en su último comunicado.

El ministro pidió "contención y mesura" al conjunto de las fuerzas políticas, y también lealtad hacia el Gobierno, encargado de dirigir la política antiterrorista. Esa petición, precisó, concierne especialmente al principal partido de la oposición.

La posición del Ejecutivo, insistió, es combatir el terrorismo en todos los frentes, con los instrumentos proporcionados por el Estado de Derecho, y afirmar y defender los principios de las reglas del juego democrático.

Según esas reglas, explicó el ministro, los delitos son perseguidos penalmente y quien desee jugar a la política democrática "debe caminar hacia la ley, porque la ley no va a caminar a quien esté fuera de ella".

López Aguilar criticó al PP por intentar "una vez más dar pábulo a los comunicados de ETA dándoles alguna credibilidad", algo que juzgó "absolutamente impropio e indigno" de un partido que ejerce la oposición, cualquiera que sea, porque significa "alentar" a una organización terrorista.

Sobre las distintas investigaciones judiciales que se siguen contra el entorno de ETA, el ministro reiteró que los tribunales actúan con total independencia y el Gobierno no interfiere en su labor.

Si el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska percibe alguna actuación "sospechosa", como pudiera ser que agentes de seguridad avisen a miembros de ETA de posibles redadas, es absolutamente independiente para emprender las acciones que juzgue oportunas para esclarecer los hechos.