La ley antitabaco, que entró en vigor el pasado 1 de enero, daba una moratoria de ocho meses a los locales de más de 100 metros cuadrados para construir barreras que separaran las zonas de fumadores de las zonas para no fumadores.

Un 70% del local, como mínimo, tiene que ser espacio libre de humo. Y la barrera debe ser "un tabique completo o una puerta independiente", ya que una cortina o uhn biombo "no hace nada".

Según declaró a Servimedia Rodrigo, "no es negativo que la mayoría de los restaurantes y bares vayan a ser para no fumadores". De hecho, "el 70% de la población aprueba que en los locales de ocio, sobre todo los restaurantes, no se pueda fumar".

Sin embargo, a su juicio, muchos hosteleros no están haciendo obras porque se resisten a aplicar la norma.

En este sentido, Rodrigo consideró que los propietarios de los locales confían, equivocadamente, en que se concedan plazos y prórrogas para aplicar la ley.

Además, algunas comunidades autónomas están suavizando la aplicación de la norma ante la "presión brutal de los hosteleros".

Finalmente, Rodrigo insistió en que la fecha límite es el 31 de agosto y que, si a partir de esa fecha los hosteleros siguen permitiendo fumar aunque no haya barreras de separación, "las comunidades autónomas tendrán que tomar medidas".