LLEGAN A ESPAÑA LOS PRIMEROS SOLDADOS DESTINADOS EN BOSNIA PARA DISFRUTAR DE DOCE DIAS DE PERMISO
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Noventa soldados de la "Agrupación Málaga" del Ejército español, que participan en tareas humanitarias en la antigua Yugoslavia, llegaron hoy a Zaragoza, Madrid y Málaga para disfrutar de doce días de permiso.
Los militares, la mayoría legionarios, fueron transportados desde Croacia por un Hércules de la Fuerza Aérea Española, que tuvo a media tarde como fin de trayecto la Base Militar de Málaga, después de realizar escalas en Zaragoza y Madrid.
El Ministerio de Defens notificó hace cuatro días el inicio de las vacaciones, a pesar de que en un principio no disfrutarían de permiso hasta cumplir los cuatro meses de misión humanitaria, hecho que provocó la lógica sorpresa entre los efectivos.
La expedición, al mando del comandante Palomino, del Tercio de la Legión en Ronda, estaba compuesta por soldados de los regimientos de Ingenieros y Caballería, de Madrid y Zaragoza, respectivamente, así como por caballeros legionarios de Ronda, Ceuta y Melilla.
Numerosos famliares de los soldados españoles aguardaron en la Base Militar de Málaga, a donde llegó el grueso de la expedición -cuarenta y cuatro legionarios de la décima Bandera de Ronda - produciéndose escenas de emoción.
El comandante Palomino señaló que "este permiso ha elevado la moral de los muchachos", al tiempo que confesó que el resto de militares desplazados a Bosnia-Herzegobina "no se desesperan por tomar su turno de vacaciones".
La euforia por pisar tierra española, lejos de conflictos bélicos, ea la tónica entre los soldados. Uno de ellos, el legionario tinerfeño del regimiento de Ronda Juan Kenty aseguró a Servimedia que "lo primero que voy a hacer en estos doce días es saludar a mi madre y después pasármelo bien".
Kenty manifestó que los peores momentos pasados en la antigua Yugoslavia fueron "cada vez que íbamos por la carretera de escolta y comenzaba a llover. Entonces sí pasábamos miedo, porque era una vía muy peligrosa".
A pesar de que su trabajo es duro, los soldados españoles ha tenido tiempo de aprender algunas palabras en idioma balcánico, fruto del contacto con los nativos, aunque afirman que "hemos sido mejor recibido por ser españoles que por ser militares".
Otro de los momentos duros de estos militares fueron las celebraciones navideñas y de nochevieja lejos de sus casas. "Allí tuvimos mucha fiesta, pero lógicamente nos acordábamos de la familia, pero la misión que hemos cumplidos era lo primero, porque allí hay gente que lo está pasando muy mal".
El principal prolema de la estancia de la "Agrupación Málaga" en Bosnia-Herzegobina es, a juicio de la mayoría de los soldados, "el intenso frío. Ya teníamos ganas de estar menos abrigados".
Este primer turno de noventa soldados regresará a la antigua Yugoslavia el próximo día 23, para relevar a otros tantos compañeros que iniciarán entonces sus permisos, y así hasta completar la totalidad del contingente español en servicio humanitario.
(SERVIMEDIA)
12 Ene 1993
C