El último Informe Perspectivas Turísticas Exceltur, relativo al primer trimestre del año, muestra que ha sido un primer trimestre atípico por la celebración de la Semana Santa en marzo; la comparación con 2004, cuando se produjeron los atentados del 11-M, y el elevado precio del petróleo, que ha repercutido en los costes del sector.

Según Perelli, ha sido un trimestre con tendencia a la desaceleración, en el que el "fuerte dinamismo" del turismo nacional ha compensado la desaceleración de la llegada de turistas extranjeros. El Indicador Sintético del Turismo de Exceltur, equivalente al PIB turístico, creció en el primer trimestre un 1,8%, por debajo del 2,4% del último trimestre de 2004 y del crecimiento de la economía en el primer trimestre.

En 2005, Exceltur cree que el mercado español seguirá creciendo tanto en número de viajes como en gasto; y que en el turismo receptivo, mejorará el mercado alemán (un 2,5%) y se mantendrán las llegadas de británicos (2,3%). Según sus estimaciones, el PIB turístico crecerá en 2005 un 2,1%, por debajo del incremento de la economía, y los ingresos por turismo globales subirán un 1,2%.

La favorable evolución del turismo español en el primer trimestre ha hecho que sea un buen comienzo de año en ventas para las agencias de viajes y touroperadores españoles (el 42% las ha aumentado y el 48% mantenido con relación a 2004). Además, han mantenido mayoritariamente sus niveles de beneficios (el 57%) y casi un 20% los han aumentado.

También ha sido un primer trimestre bueno en ventas para las compañías de transporte (el 63% las mantienen y el 37% las aumentan), pero que no se ha traducido en unos mayores beneficios como consecuencia del escenario de reducción de tarifas e incremento de costes por el petróleo. De hecho, el 55,1 de las empresas consultadas redujo sus beneficios y el 12,2% los mantienen, frente a un 33% que los aumentan.

Según los datos de Exceltur, los turistas extranjeros aumentaron un 7,4% (en 650.000 personas) en el primer trimestre (el 10% en 2004) por el aumento del tráfico de las compañías aéreas de bajo coste, que creció en 700.000 personas. Los viajeros de estas compañías no suelen venir con paquetes turísticos, tienen un gasto medio diario inferior al del turista medio (un 2,9% menos) y usan sobre todo la vivienda residencial de familiares y amigos.

Esto explica la escasa incidencia del aumento de la llegada de turistas en las pernoctacones hoteleras, que sólo han aumentado un 0,8% en el primer trimestre, y el hecho de que el primer trimestre del año no haya sido tan bueno para las ventas y beneficios del alojamiento reglado. En concreto, el 52% de los hoteles y demás alojamientos han bajado sus ventas y más del 51% han reducido sus beneficios, resultando los más perjudicados los hoteles de costa.

En cuanto a las perspectivas de ventas para el segundo trimestre respecto a igual período de 2004, son buenas para las agencias de viajes, las empresas de ocio y, en menor medida, los hoteles urbanos, mientras que los hoteles de costa y las empresas de transporte no esperan un incremento de su facturación.

SOBRECAPACIDAD Y GUERRA DE PRECIOS

Según Zoreda, la sobreoferta de alojamiento en España también está influyendo en los resultados económicos de los hoteles. También cree que hay sobrecapacidad en el transporte aéreo, lo que, unido a la gran competencia internacional que existe y al aumento de las compañías de bajo coste, está facilitando una fuerte "guerra de precios" entre las compañías aéreas.

"O se da una vuelta a esa guerra de precios, que es pan para hoy y hambre para mañana, o estamos en una espiral peligrosísima", advirtió Zoreda, ya que dijo que las ofertas de precios pueden favorecer coyunturalmente a algunas compañías, pero que esa espiral es perjudicial para el sector.

Zoreda insistió en que la competitividad del sector turístico español basada en precios es cada día menor e insistió en la necesidad de lograr una mayor penetración en segmentos de mayor valor añadido. Explicó que para afrontar los retos que tiene el sector es necesaria una estrategia consensuada a largo plazo, con una mayor coordinación e implicación de las diversas comunidades autónomas.

Para Zoreda, el Consejo de Ministros monográfico sobre turismo que está previsto que se celebre en mayo evidencia la sensibilidad del Gobierno hacia este sector, y supone una oportunidad única, a su juicio, para "impulsar las diversas políticas transversales que incidan en la mejora de la competitividad turística española".