"Una vez más, se sitúa al margen de la democracia y fuera de la Constitución", denunció Llamazares ante los asistentes al Consejo Político que ratifica hoy su plan de acción para la próxima etapa.

A su juicio, la Iglesia "ha caído en el malentendido de que la Constitución es una Constitución clerical o confesional", cuando, aunque no es completamente laica, "la moral de la Iglesia no es la moral del Estado, y la Iglesia no determina las leyes civiles, mucho menos la del matrimonio homosexual".

Este posicionamiento debe llevar al Gobierno, opinó, a "avanzar en el laicismo, en la separación entre Iglesia y Estado, denunciando los acuerdos con el Vaticano; y avanzar en la autonomía financiera, de manera que no fuera necesario que nadie marcase en su declaración de la renta" la casilla de la Iglesia católica.

Por último, emplazó al Ejecutivo a promover el laicismo en la enseñanza, por que "no se trata de dar una respuesta anticlerical, sino una respuesta laica a una Iglesia que aún no se ha dado cuenta de que existe una separación entre la sociedad civil y la jerarquía eclesiástica".