En una rueda de prensa en la sede de IU, al ser preguntado por el debate interno en el partido mayoritario de la oposición Llamazares quiso expresar su respeto a las discusiones en el seno de cada fuerza política.

En cualquier caso, el líder de Izquierda Unida se mostró convencido de que no se trata de un debate "de ideas, sino de poder", y con el único objetivo de "pasar factura después de las elecciones generales".

Denunció que ante la derrota electoral el PP sólo se plantea dos opciones, "encajarla con la vuelta a la política de crispación y confrontación, o tomando medidas más duras todavía, ultraliberales", y avisó de que ese no es "el camino de una derecha con aspiraciones de gobernar".