Llamazares, que asumió su fracaso "como coordinador general y como candidato", anunció para los próximos meses la cnvocatoria de una Asamblea "para dar la palabra a la militancia y que sea ella la que garantice el lanzamiento y revitalización de un proyecto de izquierdas imprescindible para la sociedad española".

El líder de IU, tras asumir la responsabilidad de "un fracaso sin paliativos", agradeció a la militancia el tremendo esfuerzo realiado en esta campaña, "porque sin ellos no hubiéramos podido abordar el tsunami bipartidista".

El resultado electoral ha sido, a su juicio, "un golpe para la diversidad y la pluralidad política" en España. "El tsunami bipartidista ha hecho un flaco favor a la democracia y a la diversidad política", agregó.

Sin embargo, aseguró que existe "un espacio de izquierda vivo" que la formación quiere revitalizar a partir de ahora.

Asimismo, aseguró que el resultado de hoy no hace justicia al trabajo realizado por IU. "Lo acatamos como demócratas, pero no es justo para IU, porque el sistema electoral nos discrimina. Nuestro apoyo ha sido el mayor entre todas las fuerzas minoritarias, pero no se ha traducido en número de escaños".

Pese a los malos resultados, dejó claro que Izquierda Unida seguirá luchando por el cambio de izquierdas y "estamos convencidos de que nuestro proyecto de izquierdas seguirá operativo, pese a la pérdida de recursos y escaños, y quien quiera cambio de izquierdas lo tendrá en IU y en Iniciativa per Catalunya".