"El Estado efectista de la comunicación poco tiene que ver con una actuación eficaz en materia antiterrorista", declaró Llamazares a Servimedia, tras denunciar lo que considera una "teatralización de los poderes públicos para aparentar contundencia en la lucha contra ETA".

En su opinión, "no hay razones para sobreactuar, porque tenemos un Estado de derecho fuerte" que no requiere utilizar el Código Penal como "trinchera, como el Código Penal del enemigo", que se aplica de forma "desmesurada, en grado de atentado" contra quienes no tienen implicación directa en la actividad terrorista.

Explicó que "la altura moral del Estado de derecho es que funciona independientemente de quien cometa el delito, y da la impresión de que con este Código Penal del enemigo, frente al Estado de derecho prevalece la razón de Estado, lo cual es muy preocupante".

Independientemente de esta consideración, Llamazares arremetió contra Otegi, cuya advertencia de que si es encarcelado mañana se obstaculizará el proceso de paz "no es convincente, porque hasta el momento en que se declare una tregua definitiva y condene la violencia "no será interlocutor político".

"La principal aportación al proceso de paz que puede hacer es que emplace a ETA a abandonar las armas y condenar la violencia", prosiguió. "Mientras no lo haga, no será un interlocutor fiable, sólo seguirá siendo uno más del entorno 'abertzale'".

Por ello, recomendó al dirigente batasuno que se dé "una mínima oportunidad" de tener una voz legitimada en el proceso con la exigencia a ETA de que cese la actividad armada, o "difícilmente va a ser un interlocutor".