Tras la acción de protesta llevada a cabo la semana pasada en Cerceda (A Coruña), Greenpeace considera que es ahora cuando los ayuntamientos deben actuar. "Los ciudadanos gallegos han dicho 'no' a la incineración con su voto en las pasadas elecciones del mes de junio, y ahora deben ser los representantespolíticos quienes deben actuar y abandonar la incineración como sistema de gestión de los residuos", declaró Xavier Pastor, director Ejecutivo de Greenpeace España.

Greenpeace recuerda que en España hay ya en funcionamiento experiencias alternativas a la incineración que están dando resultados esperanzadores y que demuestran la viabilidad de las propuestas que desde hace años viene planteando la organización ecologista.

A juicio de esta organización, la incineración de residuos es un sistema de gstión que derrocha recursos naturales, al quemar materiales que podían ser reaprovechados. Se trata, a su juicio, de una tecnología muy cara y que condiciona los programas de reducción y de reciclaje. Greenpeace asegura que desde el punto de vista energético, los programas integrales de reciclaje ahorran de tres a cinco veces más energía que la producida en las incineradoras.