García Escudero exhibió antelos periodistas un documento de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, fechado el 31 de enero de 1996, en el que se informaba a Carlos Moro (en el documento figura como Carlos Mozo Moreno) que le era concedida una subvención al cultivo de lino textil por valor de 10.561.317 pesetas.

La citada ayuda corresponde a la campaña agrícola 1995/96 y significa que el cultivador recibe una subvención de 126.619 pesetas por cada hectárea de 83,41 que declaró el actual delegado del Gobierno en Castilla-LaMancha.

El responsable popular destacó que, en febrero de 1996, Moro no ostentaba cargo público alguno y que en esa fecha "Loyola de Palacio no era ministra de Agricultura, sino Luis Atienza, y en febrero de 1996 no era presidente del Gobierno José María Aznar, sino Felipe González".

Esos datos demuestran, a su juicio, que "no ha habido información privilegiada, ni abuso de cargo", puesto que en aquel momento Moro no ocupaba ningún puesto público.

Todo ello "desmonta la argumentación de los azaprimas. No había cazaprimas" porque las subvenciones al lino era una práctica que "viene desde muy antiguo" y en concreto las ayudas referidas al delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha son "de responsabilidad absoluta del entonces ministro de Agricultura, el señor Luis Atienza", del PSOE.

Del mismo modo, insistió en que la tramitación y control de las ayudas al lino correspondía a la comunidad autónoma y, por tanto, la responsabilidad "era y es de don José Bono y de la Junta de Comunidades". Afirmó que el PSOE "ha incurrido en una gravísima irresponsabilidad electoral" y, en concreto, acusó a Bono de tratar de utilizar este asunto en su favor. "Avisamos de que se le iba a volver en contra y se le ha vuelto en contra".

Por ello, García Escudero pidió al presidente de Castilla-La Mancha que "piense muy bien si debe mantener su candidatura. Después de la alarma social que ha despertado y de como tiene a los agricultores lo que no puede hacer es presentarse como candidato a las próximas elcciones".

"Hay que ser consecuentes. Si el señor Bono ha venido pidiendo reiteradamente en los últimos días la dimisión del delegado del Gobierno debería asumir sus propias responsabilidades por el mismo razonamiento", aseguró.

Escudero se mostró convencido de que la comisión de investigación parlamentaria sobre el lino llegará "hasta el fondo" y logrará la aclaración definitiva de la polémica.