Así lo comentó en la rueda de prensa para exponer los resultados obtenidos en 2022, ejercicio en el que Línea Directa ganó 59,5 millones de euros, un 46% menos, por el impacto de la alta inflación, el aumento de la siniestralidad en la medida en que se ha incrementado la movilidad tras la pandemia y el incremento del baremo de lesiones y de los accidentes mortales.

Al ser preguntada por los precios, ante el mantenimiento de la inflación y su traslación a los costes, Ayuela respondió que “nos mantenemos en nuestra política de precios que es que a cada cliente le damos su precio según su riesgo, intentamos no mutualizar”.

En este sentido, señaló, sin dar cifras, que unos clientes pagarán más y otros menos con el objetivo de mantener el diferencial en la prima media en el 13% respecto al sector.

Para ello, explicó que proseguirán con la digitalización de los servicios y que la compañía es “enormemente austera” y seguirá en esa línea en este año.

Respecto a las estrategias en precios de otras compañías, Ayuela se limitó a resaltar que Línea Directa busca recuperar el margen técnico y “no hacer subidas generalizadas ni bajadas”, sino ajustar la tarifa al riesgo. Apuntó que el riesgo de los clientes es “muy bueno” porque, pese al aumento de la movilidad, la frecuencia siniestral se mantiene por debajo de la de 2019.