En el escrito, Canivell considera que, "teniendo en consideración que se han practicado las diligencias oportunas y que no existen elementos relevantes para la instrucción que no hayan sido incorporados al sumario", procede declarar cerrada la investigación contra el juez, y se da traslado de toda la documentación a la Sala.

Será ahora una sala compuesta por tres magistrados la que, en un plazo aproximado de 15 días decida qué debe hacerse con est sumario: fijar la apertura del juicio contra Liaño, devolver la instrucción a Canivell para que siga realizando más pruebas o archivar el caso, si bien la primera posibilidad parece la más probable.

La Sala está compuesta por los magistrados Gregorio García Arcos, José Manuel Martínez Pereda y Enrique Bacigalupo, los mismos que admitieron a trámite la querella contra Liaño (en aquellas fechas el fallecido Ramón Montero sustituía a García Ancos).

Este mismo grupo de magistrados deberá también reslver en los próximos días el recurso de apelación presentado por el juez Gómez de Liaño contra su procesamiento.

Así, en las dos próximas semanas se sabrá si el Tribunal Supremo abre juicio oral contra Liaño (que tendría lugar aproximadamente en el mes de enero de 1999), o bien cierra este sumario contra el juez de la Audiencia Nacional.

Además de la conclusión del sumario, el Supremo comunicó también la negativa a todas las solicitudes relacionadas con el "caso Liaño" que estaban pendientes, ente ellas la nulidad de las actuaciones pedida por el propio juez.

Finalmente, en contestación a Liaño, el Supremo informó que este caso es el único contra un magistrado que se ha constituído formalmente en sumario para su instrucción, mientras que en el último año, otras 8 investigaciones contra jueces y magistrados se resolvieron por la vía del procedimiento abreviado.