Almunia expresó en rueda de prensa su preocupación por un problema que "viene de lejos" y que se "agrava" con decisiones como la del Tribunal Supremo respecto l juez de la Audiencia Nacional.

Después de analizar la situación en la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, recordó que los socialistas han denunciado en muchas ocasiones "la mezcla de intereses espurios en torno a algunos sectores minoritarios, pero relevantes del sector de la judicatura y del Ministerio Fiscal".

Además, lo han hecho "frente a la incomprensión de algunos otros sectores de la política o de medios de comunicación que decían que los socialistas veíamos fantasmas y nos inventábamosconspiraciones".

Ahora, agregó Almunia, es la Sala Segunda del Tribunal Supremo la que ha decidido procesar a Javier Gómez de Liaño por una presunta triple prevaricación, ante la que consideró "inevitable" la suspensión del juez.

El secretario general del PSOE añadió que sólo "su dependencia política de intereses partidistas del PP" puede explicar la actitud en este caso del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, cuya comparecencia han solicitado en el Congreso.

Estos acontecimientos y l percepción ciudadana de que algunos jueces y fiscales actúan en función de "intereses particulares y, a veces, contrarios al ordenamiento jurídico", está en la base de la creciente pérdida de confianza en ellos, sentenció.

Por este motivo, reiteró Almunia, el PSOE envió hace cuatro meses al presidente del Gobierno un documento que contenía propuestas de solución al problema "y seguimos sin recibir respuesta".

"Espero que más pronto que tarde y a la vista de cómo se agrava progresiva y aceleradamnte" la situación, el jefe del Ejecutivo responda, concluyó Almunia.