Según informó en rueda de prensa el vicepresidente primero de la Cámara Alta y portavoz de la Mesa, Alfredo Prada, el acuerdo, adoptado por unanimidad, establece la celebración de un pleno de orden legislativo únicamente, es decir, sin sesión de control al Gobierno, en ese día 25, algo que no estabainicialmente previsto, pero que no implica su consideración como pleno extraordinario al estar dentro del periodo de sesiones, que acaba el 30 de junio.

Puesto que el Gobierno ha anunciado la declaración de urgencia del proyecto de ley, el trámite en el Senado se limita a 20 días naturales.

Así, entrará en la Cámara Alta el día 5 de junio, tras ser aprobado el día antes por el pleno del Congreso. En esa fecha se abrirá el plazo de presentación de enmiendas y vetos (4 días), tras el cual se designrá una ponencia, que elaborará el informe que será debatido en comisión y después elevado al pleno, todo ello en el citado plazo de 20 días que concluirá el 25 de junio.

Si no se introduce ninguna enmienda al texto en su trámite en el Senado, la ley entraría directamente en vigor al ser publicada en el BOE. Si por el contrario se introdujera alguna modificación, debe ser devuelto al Congreso, donde sería definitivamente aprobado en el mes de julio, declarado hábil en la Cámara Baja.