Aznar, que respondió así en la sesión de control al Gobierno a una pregunta del coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, consideró que es "lógico" y "democrático" que los representantes del pueblo en el Parlamento o en el Senado puedan actuar contra quienes quieen "destruir la democracia amparándose en ella".

El jefe del Ejecutivo, que dirigió la mirada tanto al líder de IU como al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, durante su intervención, explicó que la propuesta del Gobierno da la oportunidad a diputados y senadores de instar la ilegalización de los partidos políticos que violen reiteradamente el marco jurídico y recalcó que la decisión final corresponderá siempre a la Justicia.

"La democracia tiene el derecho a defenderse de quellas organizaciones que tratan de destruir la democracia", afirmó entre los aplausos de sus propios diputados. "Una de ellas es Batasuna". Y argumentó que su partido piensa mantener esta postura a pesar de que, cada vez que toma una decisión que cerca al terrorimo, "hay gente que dice que no es oportuno".

Por su parte, Llamazares manifestó sus dudas respecto de las ventajas que puedan suponer la ilegalización de Batasuna para luchar contra el terrorismo y advirtió al presidente del Gobierno de que a ETA hay que derrotarla en las urnas".

Asimismo, el coordinador general de IU denunció la existencia de "aspectos ambiguos" en el título de la modificación de la Ley de partidos políticos, que, según él, ni los tribunales ni los expertos legales creen que sea constitucional.

Llamazares reprochó también al Gobierno la "flaca memoria" de la que hace gala con la modificación de la Ley de Partidos Políticos porque, con ella, se reduce el apoyo que la mayoría de los partidos dio al texto en los inicis de la democracia y que ahora va camino de convertirse en una ley "partidista".